Departamento de Ica
La ciudad de Ica está situada sobre la costa sur de
Lima. Es un oasis en medio de las pampas desérticas del Perú. Esta rodeada de valles hermosos,
famosa por sus viñedos y la producción de vinos de excelente calidad. Otras
ciudades de importancia son Chincha, Pisco, Nazca y Palpa.
Ica es famosa por sus campiñas, centros
vitivinícolas; por la calidad de su vinos, encontrándose en esta zona los más
importantes productores de vino. Merece destacar la fiesta de la vendimia de Ica, llevado a cabo con gran consumo
de vino y cachina. En sus fértiles valles se cultiva el algodón, vid, tabaco y lino. Posee puertos importantes dedicados a
la extracción de del atún, bonito y pez espada, de los cuales se producen conservas y harina de pescado.
Ica es el único departamento de la costa sur del Perú que no tiene montañas andinas en
su territorio. Aquí se encuentran las enigmáticas Líneas de Nazca y la Reserva Nacional de Paracas.
Presenta un territorio relativamente accidentado, extensas pampas, tablazos
desérticos y algunos valles. La laguna de Huacachina; donde afloran aguas termos medicinales, El museo regional de Ica, los geoglífos o líneas de Nazca, la Reserva Nacional de Paracas: donde se puede apreciar diversas
especies de la fauna marina y accidentes litorales como arcos, farallones é
islotes, desde este punto se puede apreciar el famoso candelabro.
Ica posee un clima cálido desértico de tipo subtropical seco, con una
temperatura media de alrededor de 22 °C. A diferencia de la costa central como
las de (Ancash y Lima), el clima iqueño es seco y soleado aún durante los meses de invierno,
aunque se advierte que las noches invernales son más frías y puede bajar a 7 u
8 °C. Los veranos son más cálidos y secos que la costa central del Perú y puede llegar cerca de los 36 C°,
sobre todo en la ciudad de Ica que está ubicada tierra adentro. La presencia de paracas o vientos
fuertes, es muy común durante los meses de verano.
Ica ofrece playas y aguas termales,
variada fauna marina, museos de sitio y excelentes servicios de hoteles.
En Ica se encuentra ubicada la Reserva Nacional de Paracas; en ella viven
colonias de diversos animales, como lobos marinos y aves costeras de diversos tipos.
ANTECEDENTES PRE HISTORICOS DE ICA
El territorio del Departamento de Ica, es el más antiguo
del Perú, y en 1937, se han descubierto los únicos vertebrados fósiles
conocidos en el Perú, sobre los terrenos de la edad terciaria del Valle de Ica,
los cuales han sido clasificados por especialistas del Museo de Historia
Natural de Nueva York, como pertenecientes a un cetáceo desaparecido, y cuyos
restos son únicos en el mundo. También se encontró una mandíbula de mastodonte
en el terreno cuaternario inferior, que según opinión del sabio francés Paul
Rivet, fue compañero de los primeros hombres en América, hallazgos que fueron
constatados por la Comisión de la Facultad de Ciencias de la Universidad Mayor
de San Marcos, que en 1940 presidió el Catedrático de Paleontología y Geología,
ingeniero Jorge A. Broggi, y la clasificación de cuya mandíbula como la del
Mastodon Andinum fue confirmada por el profesor J. Newel, catedrático de Paleontología
de la Universidad de Columbia.
En todo el Litoral de la Provincia y del Departamento de
Ica, se hallan estratificados los cinco grados de cultura estudiados por el
Arqueólogo alemán Max Uhle, en los yacimientos arqueológicos de la costa
peruana; a saber : Kiokemondingos, o restos de cocina de los primitivos
pescadores, acumulados en la boca del río Ica; la Cultura Ica Antigua, de
origen desconocido, que fue revelado al mundo por el citado Max Uhle en el
Congreso de Americanistas de Sttugart, en 1908; la Cultura Collagua o del
Tiahuanaco, perfectamente caracterizada; la Epigonal o Ica Moderna, que se
extiende hasta Atacama en Chile; y la Incásica o Cusqueña de todos conocida. El
Historiador de la Ciudad de Ica, Dr. Alberto Casa Vilca, al constatar este
orden cronológico de las culturas en los estratos prehistóricos del Valle de
Callango, ha encontrado momias con utilaje de madera entre los que se hallan
los remos que corresponden a la edad prehistórica en que, conforme a la teoría
comprobada por el explorador Noruego Thor Hayerdal, los primitivos peruanos
viajaban a la Oceanía.
El alto grado de cultura prehistórica de los pueblos que vivieron en el territorio de la Provincia y Departamento de Ica, se halla documentado en el inmenso material arqueológico contenido en los museos del mundo; y está también comprobada por las fuentes históricas escritas, que aseveran que desde la más remota antigüedad, estos valles formaron parte del llamado Imperio cultural Yunga, que se extendió desde Panamá hasta el Sur de Chile, siendo gobernados por sus curacas, unas veces independientes y otras federados para su defensa mutua.
El alto grado de cultura prehistórica de los pueblos que vivieron en el territorio de la Provincia y Departamento de Ica, se halla documentado en el inmenso material arqueológico contenido en los museos del mundo; y está también comprobada por las fuentes históricas escritas, que aseveran que desde la más remota antigüedad, estos valles formaron parte del llamado Imperio cultural Yunga, que se extendió desde Panamá hasta el Sur de Chile, siendo gobernados por sus curacas, unas veces independientes y otras federados para su defensa mutua.
La más remota ciudad indígena que se ha encontrado, es el
pueblo de Ullujalla a ambas orillas del río de Ica, en el valle antiguo de
Callango, las paradas de cuyas casas de huarango forman calles de horcones; y
la ciudad incaica más antigua de la que se tenga noticia por tradición, es la
de Tacaraca, mandada fundar por Pachacútec, para residencia del Curaca Aram
Vilca que hallaron gobernando el Valle de Ica, y de cuya alianza con el joven
Túpac Yupanqui, hijo de aquél emperador, por mediación de la hija del Curaca,
nació la romántica tradición de la Achirana que recogió Ricardo Palma, y que
Alberto Casa Vilca depuró e interpretó históricamente en la Leyenda de La
Achirana ( Peruanidad, año 1934 ) .
Como durante todo el reinado de Pachacútec, no volvieron a
presentarse los soldados ni los funcionarios quechuas, el régulo
Aranvilca seguía gobernando con todas las instituciones yungas, hasta que el
hijo y sucesor de aquél, Túpac Yupanqui, vino a implantar la organización
incaica, aplicando al Valle de Ica su división general de los ayllus, en Hanan
Ica y Urin Ica, al igual que sus antecesores dividieron al Cusco, en Hanan
Cusco y Urin Cusco, es decir Valle Alto y Valle Bajo.
Al llegar los conquistadores españoles al mando de
Francisco Pizarro, encontraron destruida la Ciudad de Tacaraca, que desde los
tiempos incaicos era víctima de los terremotos, por lo que se le dio este
nombre, derivado según Torres Rubio, de Taca, golpe, destrucción, y racay,
corral, patio descubierto, o sea montón de ruinas. Los hispanos
repartieron el valle en dos encomiendas, siguiendo la misma división de los
Incas : la de Hana Ica para el Regidor perpétuo del Cabildo de los Reyes, Don
Juan de Barrios; y la de la Lurin Ica, para el primer Alcalde de Lima Don
Nicolás de Ribera, El Vviejo, pro provisiones reales firmadas desde Jauja, el
año 1534, por dicho Gobernador.
Después de la sublevación de los cuatro curacas de Ica, Pisco,
Chincha y Nasca, y tras la vigorosa defensa que aquellos encomenderos hicieron
de la Audiencia contra la revolución de Francisco Hernández Girón, el cuarto
virrey, Don Diego López de Zúñiga y Velasco, ordenó la fundación de la Villa de
Valverde del Valle de Ica.
LOS FUNDADORES DE ICA DON NICOLAS DE RIBERA EL VIEJO Y DON
JERONIMO LUIS DE CABRERA
El primero, Don Nicolás de Ribera y Laredo, conocido por
su apodo “ El Viejo ” para distinguirlo de su homónimo, Don Nicolás de Ribera “
El Mozo ”; es uno de los pocos compañeros de Francisco Pizarro ( en quien recae
el testimonio de todos los cronistas ) que permaneció a su lado en la Isla del
Gallo, y por lo tanto fue uno de los Trece de la Fama; lealtad a su jefe que
conservó durante todas las vicisitudes de la conquista y colonización de la
Nueva Castilla.
Encargado por Pizarro desde Jauja, de fundar en la Costa
una nueva capital del Perú, lo hizo en 1534, en el Valle de Pisco, trazando la
ciudad sobre el pueblo indígena de Sangalla, cuyos restos son conocidos ahora
por “ Lima, la Vieja ”, que abandonó para concentrar a los pobladores
españoles con los de Pachacámac para fundar la Ciudad de los Reyes. Concurrió,
pues, a este ehcho capital de nuestra historia, siendo nombrado Primer Alcalde
del Cabildo que instaló el 20 de Enero de 1535, y que por cuatro veces más,
vino a desempeñar desde su residencia del Valle de Ica, por su lealtad
comprobada a la causa del Fundador de Lima y del Emperador Carlos V. Por tales
méritos, recibió del Conquistador, desde Jauja, en 1º de Setiembre de 1534, la
muy rica encomienda de Lurin Ica, que comprendía el Valle Bajo, hasta Ocucaje,
donde fijó su residencia, frente al antiguo Tambo de Los Incas, que se llamó “
La Venta de Chagua ”, en cuyo dominio fundó, en 1560, la primera Parroquia de
Santiago de Luren, para cristianizar y someter a los indios encomendados, que
con frecuencia se le rebelaban para recobrar su libertad.
El eminente historiador peruano Don José de la Riva Agüero
y Osma, que fue su último descendiente directo, en su obra “ Nicolás de Ribera
y su posteridad ” , anota cuatro rebeliones de los Valles de Chincha, Pisco y
Nacsa, encabezada por el Curaca de Ica ( no caciques, según adviertren los
virreyes en sus memorias ), hasta que según encontró en sus investigaciones.
Pizarro llamó al Cabildo de los Reyes a Ribera y al Curaca, y haciéndole
colocar la mano derecha sobre la cruz de su espada, celebraron una alianza de
paz entre españoles e indígenas, prometiendo solemnemente el Encomendero, lo
cual ratifica en el documento que sigue, mayor suavidad en el trato y lenidad
en los tributos, que el Curaca recolectaba en especias para entregar a
Ribera.
La nobleza moral de este colonizador queda consagrada en
la carta de fundación y dotación del primer hospital para indios que erigió en
Ica, en 1560, en la que se destacan hechos inusitados para su época y que queda
esclarecido como sigue : 1º Que aunque no estuvo presente en el proceso de
Atahualpa, cuya muerte, por ende, no aprobó : “ llevó parte del oro y plata de
Cajamarca y de otros despojos que hubieron en la conquista ”, pero los devolvió
por estar en contra de su conciencia; 2º Que recibió y tomó al dicho Marqués
Pizarro los indios que le encomendó y tuvo en el Valle de Ica, de “ los cuales
recibió, cobró y llevó los trabajos y servicios personales y otros
aprovechamientos “ ; pero también devuelve su valor para la fundación de esta
obra pía; 3º Niega el derecho de conquista, ratificando en su testamento que
después de consultar con teólogos y juristas, no cree es “ justo e ilícito se
puede hacer la guerra a los naturales de este Reino por ser infieles ”, lo que
de hecho cumplió con esta fundación.
El hecho histórico evidente es que, según lo demostró Riva
Agüero, la Encomienda española no tuvo carácter feudal, ni dominio directo ni
usufructo sobre las tierras, y que aunque conforme a la cédula real de 1533
publicadas y comentada por el Dr. Porras Barrenechea, era perpetuo el
Repartimiento de indios, las encomiendas sólo duraron dos o tres vidas. Ribera
restituyó los tributos de sus encomendados, quienes quedaron dueños de sus
propiedades y gobernados por sus Curacas o indios principales, por lo que le
pueblo de Lurin Ica conservó y recobró primero su libertad.
Confundiendo la idea de su antigua nacionalidad con la de
felihgresía religiosa, y coincidiendo la jurisdicción parroquial con la de los
Pueblos indígenas, al límite de la Ciudad Española se organizaron civil y
religiosamente en una Plaza Pública para cada rama, el Templo y Casa
Parroquial, el Cabildo y Cárcel Pública y hasta el Escribano de Cabildo para
sus actos civiles. Se mantuvo esta organización étnica y social durante
el Virreynato, y sobrevivieron las razas aborígenes representadas y defendidas
por dichos Cabildos de Indígenas que se erigieron en protectores de sus
pueblos, rebelándose contra las demasías del poder colonial, conservando sus
pequeñas propiedades privadas y comunitarias, e incorporando a sus
parcialidades en los ejércitos libertadores, en la lucha por la emancipación
hasta conseguir la abolición de los últimos vestigios de servidumbre colonial.
Para probar este hecho raro en hispanoamérica, de la
supervivencia de los Cabildos Indígenas en la Ciudad de Ica hasta después de
las batallas de Junín y Ayacucho, presentamos copia auténtica de un documento
de familia, que es el Memorial presentado al Libertador Don Simón Bolívar, a su
paso por Ica, en el año 1825, que comienza así :
“ Excmo. Sr. - Las Municipalidades de los pueblos
Indígenas de esta Ciudad, cuyos presidentes suscriben este recurso, con su
mayor rendimiento ante V.E. parecemos y decimos : que presentando el más
venturoso día a estas Corporaciones por la Soberana presencia del Genio que ha
recobrado el derecho de los Indios, no quieren perder tan preciosos momentos
sin poner en el Supremo conocimiento de V.E. la situación dolorosa de los
pueblos que presiden, y los clamores con que sus inocentes habitantes solicitan
ser tratados en el país, con la distinción propia de su libertad civil y seguir
la alta clase en que tan justamente los ha elevado la Ley dictada por V.E.
sobre la igualdad de los Indígenas, pues de otro modo no cumplirán los Cabildos
recurrentes con el primordial deber que les impone su carácter representativo
.”
Este memorial obtuvo decreto del Libertador declarando la
igualdad civil y social de los Indígenas con todos los ciudadanos libres de la
República. Su fecha en Ica, el23 de Abril de 1825.
Habiendo constituido los Cabildos la base para la
Independencia, conviene recomendar a los Estados de América organizar por sufragio
popular y robustecer la acción de estos poderes locales, como firme sostén de
las democracias y eficiente escuela de civismo de las nacionalidades
hispanoamericanas.
EL FUNDADOR DE CIUDADES
DON JERONIMO LUIS DE CABRERA
DON JERONIMO LUIS DE CABRERA
El Capitán español Don Jerónimo Luis de Cabrera y Toledo,
no fue de los primeros en llegar a la conquista del Perú. Parece que vino en la
expedición de Alvarado, y bien pronto alcanzó prestancia y la confianza de los
Virreyes, comenzando su carrera de colonizador al fundar la Villa de Valverde
de Ica.
Durante los siglos pasados, cronistas e historiadores dieron los más diversos fundadores a la ciudad de Ica, desde el célebre Padre Fray Vicente Valverde hasta el supuesto Capitán Cristóbal de Valverde atribuído por Mendiburo, tan sólo porque la Villa española llavaba este nombre, que no correspondía a ningún apellido , sino a la villa natal del Conde de Nieva, Virrey que ordenó la fundación española de Ica.
Durante los siglos pasados, cronistas e historiadores dieron los más diversos fundadores a la ciudad de Ica, desde el célebre Padre Fray Vicente Valverde hasta el supuesto Capitán Cristóbal de Valverde atribuído por Mendiburo, tan sólo porque la Villa española llavaba este nombre, que no correspondía a ningún apellido , sino a la villa natal del Conde de Nieva, Virrey que ordenó la fundación española de Ica.
En 1919, el Dr. Alberto Casavilca, explorando el Archivo
Notarial de Don José G. Benavides, que había fallecido, tuvo el feliz hallazgo
de un legajo conteniendo el traslado de varias provisiones reales referentes a
la fundación de la Villa de Valverde del Vale de Ica, algunas de las cuales se
transcriben para hacer las acotaciones, porque el Acta de la Fundación hasta
ahora no ha sido hallada.
Provisión señalando términos a la Villa de Valverde de Ica
Don Diego Lóoez de Zúñiga y de Velasco, Conde de Nieva,
Visorrey, Gobernador y Capitán General de estos Reinos y Provincias del Pirú.
Por cuanto en la fundación que mandé hacer de la Villa de Valverde, que es en
el Valle de Ica, términos de esta ciudad de los Reyes, hay un capítulo del
tenor siguiente :
“ Item que la dicha Villa ha de tener jurisdicción privativa de
esta ciudad de los Reyes, para lo cual se le señalarán términos y jurisdicción
en teniendo más entera relación del dicho valle, en la cual mando entender
luego como adelante irá declarado, y cuando se haya entendido esto, declararé
en qué manera se ha de usar jurisdicción en la dicha Villa por la justicia de
ella y por la de sta ciudad de los Reyes. “
Y ahora Don Jerónimo de Cabrera, a quien cometí la fundación de
la dicha Villa para que lo hiciese con acuerdo y parecer de Pedro de las Casas,
me envió relación con el dicho parecer de la manera del dicho Valle, y platiqué
con las dichas personas los términos que sería bien que se diesen a la dicha
Villa de Valverde, y después de haberlo bien visto y entendido me pareció que
la Villa tuviese por términos todo los que está poblado al presente de indios
del dicho Valle de Ica hasta donde parte términos con los Repartimientos de la
Sierra y valles de la Nasca y Pisco, inclusive todo aquello que tenían y
poseían por sus tierras, en tiempo del Inca señalado y no más.
Por tanto, por la presente en nombre de su Majestad y por la virtud de sus reales poderes, señalo por términos de la dicha Villa de Valverde; todo aquello que está poblado de indios del dicho Valle de Ica hasta donde parte términos de la Sierra, Valle de la Nasca y Pisco, inclusive todo que tenían y poseían por sus tierras en tiempo del Inca señalando, para que la dicha Villa haya y tenga por suyos y como suyos los dichos términos por ahora y en adelante, y en el entretanto que otra cosa se provea y mande, y como tales use en ello la jurisdicción Real para la Justicia de la dicha Villa de Valverde, civil y criminalmente; y ninguna otra justicia de su Majestad que no sea la suprema, entre a usar jurisdicción en la dicha Villa y sus términos, lo cual mando que así se haga y cumpla con los citamentos y declaraciones siguientes :
Por tanto, por la presente en nombre de su Majestad y por la virtud de sus reales poderes, señalo por términos de la dicha Villa de Valverde; todo aquello que está poblado de indios del dicho Valle de Ica hasta donde parte términos de la Sierra, Valle de la Nasca y Pisco, inclusive todo que tenían y poseían por sus tierras en tiempo del Inca señalando, para que la dicha Villa haya y tenga por suyos y como suyos los dichos términos por ahora y en adelante, y en el entretanto que otra cosa se provea y mande, y como tales use en ello la jurisdicción Real para la Justicia de la dicha Villa de Valverde, civil y criminalmente; y ninguna otra justicia de su Majestad que no sea la suprema, entre a usar jurisdicción en la dicha Villa y sus términos, lo cual mando que así se haga y cumpla con los citamentos y declaraciones siguientes :
Que las apelaciones que se hicieren de los Alcaldes ordinarios
de la dicha Villa hayan de venir y vengan ante el Corregidor de esta ciudad de
los Reyes; - Que el Corregidor de esta dicha Ciudad ha de ir en persona cada un
año a dicha Villa y la de visitar y tomar residencia y cuenta de propios a los
dichos Alcaldes y oficiales de la Justicia, por tiempo de veinte días y no más,
y para el dicho efecto puede llevar Escribano ante quien pase : - Que la ejecución
de la Justicia sea con el Alguacil de la dicha Villa, y estando ocupado por la
residencia, puede criar Alguacil durante dicho tiempo. – Que así mismo el dicho
Corregidor y durante los dichos veinte días puede oír y librar pleitos,
demandas, pedimentos de partes y no puede hacer pedimentos, digo por quisas, ni
informaciones de oficio contra los vecinos ni otra persona de la dicha Villa,
fuera de la dicha vista y residencia. – Que han de poder pasar por la dicha
Villa y sus términos con vara alta de Justicia los Alguaciles y otras Justicias
que saliesen de esta ciudad de los Reyes para cualquier parte que sea, como el
que llevaré la tal vaya proveído por juez competente.
Con las cuales dicha declaraciones y con cada una de ellas,
mando que la dicha Villa tenga jurisdicción priovativa de esta ciudad de los
Reyes y de las otras partes por donde parte términos conforme lo que de suso va
declarado; y en el dicho interín que otra cosa se provea y mando, ninguna
Justicia ni otra persona quebrante la dicha jurisdicción, conforme a lo que
desuso va declarando so las penas en que caen e incurren las personas que se
entromenten a usar jurisdicción en jurisdicción extraña, y además mil pesos
para la Cámara y Fisco de su Majestad.
Fecha en la ciudad de los Reyes, a veintiséis días del mes de
Julio de mil quinientos sesenta y tres. El Conde de Nieva. Por mandato de su
Excelencia : Francisco de Luna.
Con la cédula transcrita quedó certeramente probado : 1º Que el
Virrey Don Diego López de Zúñiga fue quien mandó hacer la fundación en 17 de
Junio del año de 1563, la cual fue confirmada por el Virrey don Martín
Enríquez, en 31 de mayo de 1582. 2º Fue comisionado para la fundación don
Jerónimo Luis de Cabrera, quien lo hizo de acuerdo con Pedro de las Casas. 3º
Que el mismo Virrey señaló como términos de la Villa de Valverde, todo el Valle
de los poblados de indios con las tierras que poseían desde tiempo del Inca.
Este hallazgo fue corroborado por el eminente historiador argentino Dr. Roberto Levillier, quien en su obra Gobernantes del Perú, año de 1921, revela carta del Conde de Nieva a Felipe II con fecha 20 de Setiembre de 1563, que a la letra dice :
Este hallazgo fue corroborado por el eminente historiador argentino Dr. Roberto Levillier, quien en su obra Gobernantes del Perú, año de 1921, revela carta del Conde de Nieva a Felipe II con fecha 20 de Setiembre de 1563, que a la letra dice :
“ Como vuestra Majestad y su real consejo tiene mejor entendido
que una de las cosas más importantes que conviene hacerse para el bien de estos
reinos y asiento y quietud de ellos, es proveer de que se funden los más
pueblos de españoles que, pudiere ser, y aún así lo tiene vuestra Majestad
mandado que se haga. Y habiendo yo visto y entendido esto, he ordenado que en
los términos de esta Ciudad de los Reyes, cuarenta leguas de ellas, en un Valle
que se dice de Ica se haga un pueblo de hasta cuarenta españoles, que lo más de
ellos han servido a vuestra Majestad en esta tierra, al cual llame Valverde. Y
hace hecho esta población de manera que no se ha gastado en ella un solo
maravedí de la real hacienda y por los indios de aquel Valle no se quejase a
causa de decir que los españoles les tomaban sus tierras, ordenó que ningún
español tomase ninguna tierra de indio, ni menos de las que podía pertenecer a
vuestra Majestad, sino que quien quisiese tierras las comprase a los indios,
porque ellos tienen hartas baldías y no les sirven de nada. Y solamente dí a
cada vecino asiento para una casa y para una huerta pequeña, y esto de un
pedazo de tierra de muy poco valor que había en aquél Valle, y que aún no está
bien determinado si es de vuestra Majestad o de los indios. Paréceme escribir
esto a vuestra Majestad para que sepa los pueblos que hago poblar y la
manera que tengo en ello, para que vuestra Majestad me envíe a mendar y lo haré
así adelante o de que manera tiene en ello, y esta población es de más de otra
que en los días pasados fundamos los camisarios y yo en el Valle de Chancay que
es nueve leguas de esta ciudad que le llamamos la Villa de Arnedo, sobre la
cual antes de ahora he escrito a vuestra Majestad. ”
Estos son los dos únicos documentos fehacientes que permiten
asegurar que la Villa de Valverde fue fundada en el año 15653, por le Capitán
Jerónimo Luis de Cabrera, quien por su parte lo confiesa en la cédula de
encomienda de indios que asimismo se otorgó en 1573, como gobernador de Tucumán
y que brevemente hace constar diciendo : “ Y en el reino del Perú serví a su
Majestad en poblar y fundar la Villa de Valverde .”
EL SOLAR IQUEÑO DEL FUNDADOR
No habiendo aparecido el acta de fundación de la Villa de Ica,
no se conoce el nombre de los cuarenta españoles fundadores a que se refiere el
Conde de Nieva, ni el reparto de solares que se le hizo en la primitiva traza
de la población hecha en Tacaraca, de cuyos vestigios sólo poseemos tres arcos
del portal de la Plaza Mayor que ya han desaparecido, pero el pincel
impresionista del malogrado pintor Enrique Masías ha perennizado en el Ultimo
crepúsculo de la Villa Muerta.
Descifrando el cartulario de los primeros escribanos reales, podría reconstruirse pacientemente el plano de la Villa y la posición de los solares de sus primitivos poseedores; pero, por el momento nos contentamos con determinar la ubicación del solar que poseyó el fundador don Jerónimo de Cabrera y las tierras que le correspondieron, al igual que a los demás pobladores. Lo primero aparece, cuando a los pocos años de la fundación, la Villa es trasladada a una nueva traza en cuya Plaza Mayor la Orden de los Agustinos fundó en 1583 un convento sobre unos solares que, según el cronista Calancha, reclamó su hijo don Gonzalo de Cabrera, los cuales eran tan amplios que así lo describen : “ Fundado el Convento pidió por suya la casa don Gonzalo de Cabrera por una acción antigua, y después de haberse litigiado en la Audiencia de Lima, quedó en su posición la Orden con cierta cantidad que dio por escuzar contiendas. Fuese edificado, y tiene convento con dos claustros, y una excelente Iglesia de hermosas bóvedas de cal, ladrillo y piedra, labor de lozerías y templo estrenado. ” Y en cuanto a las huerta que le correspondió en el Valle de Ica, hemos encontrado la interesante carta de arrendamiento que a su muerte, Don Juan Rodríguez Villafuerte, curador de sus menores hijos otorga a varios indios en la cual se ubican las tierras, y que desciframos como sigue : “ En la Villa de Valverde de Ica del Pirú, en veintiocho días del mes de Junio de mil quinientos y ochenta y tres años, ante el Capitán Francisco de Camargo, corregidor e Justicia Mayor de esta Villa y en presencia de mí el Escribano e testigos suso escriptos parecieron presentes Lucas Muchacmana y Pedro Ayllo y Andrés Suyulsuri y Hjuan Chacalcausa y Felipe Changalmín y Gabriel Mochalpiña y Hernando Changalmín, indios naturales del pueblo de Lurin Ica de este Valle de Ica del Pirú, todos juntos de mancomún y por sí en nombre de Gaspar Ylqui y JuanMuchasanya y de Bartolomé Antilpi y de Antonio Chacalchine y mediante Cristóbal del Corral, intérprete, dijeron que arriendan y toman a renta de Juan Rodríguez de Villafuerte por sí y en nombre de los hijos y herederos de don Jerónimo Luis de Cabrera como su curador, y de doña Luisa Martel de los Ríos, su mujer, por la curaduría que tiene, una fanegada de tierras que tienen allí limpia y sembrada en un pedazo que tienen los dichos menores de tres fanegadas que es alinde de la huerta de Iñigo de Brizuela y de Lucas Lengua y el Río, por tiempo de un año que corre desde hoy hasta ser cumplido el dicho arrendamiento, y le han de dar de arrendamiento por dicho año doscientos pesos corrientes al dicho Juan Rodríguez de Villafuerte que estaba presente y aceptó este concierto, y los dichos indios se obligaron por sus personas y bienes de pagar el dicho arrendamiento y lo firmó el dicho Juan Rodríguez de Villafuerte y por los dichos indios un testigo, a los cuales doy fé que conozco, siendo testigos Alonso de Zúñiga y Cristóbal del Corral y Andrés de Barrios, vecinos e residentes de esta dicha Villa y lo mismo el intérprete Cristóbal del Corral, Juan Rodríguez Villafuerte, Alonso de Zúñiga, ante mí, García de Córdova, Escribano Público y de Cabildo “.
En cuanto al Escudo nobiliario de don Jerónimo Luis de Cabrera, dice el Dr. J. Uriel García : “ En la Plazuela de las Nazarenas, casa actual de las Salesianas, se encuentra un escudo correspondiente a la familia de los Cabreras – hay una pieza parlante que así lo indica – y de los Zúñigas ”, y guiado por este notable cusqueñista, fotografiamos el complicado escudo en la visita que hicimos en julio de 1934, a la ciudad Imperial del Cusco, el cual se ostenta relievado en piedra, sobre el frontispicio de su casa solariega de la moderna Plaza Billinghurst.
Descifrando el cartulario de los primeros escribanos reales, podría reconstruirse pacientemente el plano de la Villa y la posición de los solares de sus primitivos poseedores; pero, por el momento nos contentamos con determinar la ubicación del solar que poseyó el fundador don Jerónimo de Cabrera y las tierras que le correspondieron, al igual que a los demás pobladores. Lo primero aparece, cuando a los pocos años de la fundación, la Villa es trasladada a una nueva traza en cuya Plaza Mayor la Orden de los Agustinos fundó en 1583 un convento sobre unos solares que, según el cronista Calancha, reclamó su hijo don Gonzalo de Cabrera, los cuales eran tan amplios que así lo describen : “ Fundado el Convento pidió por suya la casa don Gonzalo de Cabrera por una acción antigua, y después de haberse litigiado en la Audiencia de Lima, quedó en su posición la Orden con cierta cantidad que dio por escuzar contiendas. Fuese edificado, y tiene convento con dos claustros, y una excelente Iglesia de hermosas bóvedas de cal, ladrillo y piedra, labor de lozerías y templo estrenado. ” Y en cuanto a las huerta que le correspondió en el Valle de Ica, hemos encontrado la interesante carta de arrendamiento que a su muerte, Don Juan Rodríguez Villafuerte, curador de sus menores hijos otorga a varios indios en la cual se ubican las tierras, y que desciframos como sigue : “ En la Villa de Valverde de Ica del Pirú, en veintiocho días del mes de Junio de mil quinientos y ochenta y tres años, ante el Capitán Francisco de Camargo, corregidor e Justicia Mayor de esta Villa y en presencia de mí el Escribano e testigos suso escriptos parecieron presentes Lucas Muchacmana y Pedro Ayllo y Andrés Suyulsuri y Hjuan Chacalcausa y Felipe Changalmín y Gabriel Mochalpiña y Hernando Changalmín, indios naturales del pueblo de Lurin Ica de este Valle de Ica del Pirú, todos juntos de mancomún y por sí en nombre de Gaspar Ylqui y JuanMuchasanya y de Bartolomé Antilpi y de Antonio Chacalchine y mediante Cristóbal del Corral, intérprete, dijeron que arriendan y toman a renta de Juan Rodríguez de Villafuerte por sí y en nombre de los hijos y herederos de don Jerónimo Luis de Cabrera como su curador, y de doña Luisa Martel de los Ríos, su mujer, por la curaduría que tiene, una fanegada de tierras que tienen allí limpia y sembrada en un pedazo que tienen los dichos menores de tres fanegadas que es alinde de la huerta de Iñigo de Brizuela y de Lucas Lengua y el Río, por tiempo de un año que corre desde hoy hasta ser cumplido el dicho arrendamiento, y le han de dar de arrendamiento por dicho año doscientos pesos corrientes al dicho Juan Rodríguez de Villafuerte que estaba presente y aceptó este concierto, y los dichos indios se obligaron por sus personas y bienes de pagar el dicho arrendamiento y lo firmó el dicho Juan Rodríguez de Villafuerte y por los dichos indios un testigo, a los cuales doy fé que conozco, siendo testigos Alonso de Zúñiga y Cristóbal del Corral y Andrés de Barrios, vecinos e residentes de esta dicha Villa y lo mismo el intérprete Cristóbal del Corral, Juan Rodríguez Villafuerte, Alonso de Zúñiga, ante mí, García de Córdova, Escribano Público y de Cabildo “.
En cuanto al Escudo nobiliario de don Jerónimo Luis de Cabrera, dice el Dr. J. Uriel García : “ En la Plazuela de las Nazarenas, casa actual de las Salesianas, se encuentra un escudo correspondiente a la familia de los Cabreras – hay una pieza parlante que así lo indica – y de los Zúñigas ”, y guiado por este notable cusqueñista, fotografiamos el complicado escudo en la visita que hicimos en julio de 1934, a la ciudad Imperial del Cusco, el cual se ostenta relievado en piedra, sobre el frontispicio de su casa solariega de la moderna Plaza Billinghurst.
Otro hecho que consta en la foja de servicios de Cabrera,
fue que siendo el primer Gobernador de Ica, en vista de que su Cabildo carecía
de propio le sostuvo de su peculio por tres años, de donde se trasladó al
Corregimiento del Cusco, en cuya Plaza antigua de las Nazarenas, se ostenta el
escudo nobiliario que ha adoptado la ciudad de Ica, por su nobleza moral. De
allí fue trasladado al Corregimiento de Charcas, donde fundó la Ciudad de
Córdova del Tucumán, en 7 de Julio de 1573.
INVESTIGACION DE LA CEDULA REAL DE ERECCION
Perfectamente identificado el fundador de la Villa de
Valverde y comprobada la fecha de la fundación, partiendo de este punto en mi
investigación bibliográfica, en los primeros meses del año 1935, he descifrado
desde el más antiguo Registro existente en el bien ordenado archivo del notario
señor Guillermo A. Fernald, el cual pertenece al primer Escribano del Cabildo
de la Villa, don García de Córdova, constatando que la primera escritura
comienza textualmente : “ En la Villa de Valverde del Valle de Ica del Pirú, a
dos días del mes de enero de mil e quinientos e ochenta y tres años ... “ Lo que
prueba que el nombre oficial de fue Villa de Valverde. Esta denominación
oficial encuentro que la usaron todos los escribanos reales hasta el año 1633,
sintiendo que por el mes de junio se trunque el protocolo del escribano Matheo
de Arce que hemos revisado, hasta que a partir del mes de agosto encabezan las
escrituras así . “ En la ciudad de Ica, en dos días del mes de agosto de mil
seiscientos y treinta y tres años ... “ , quedando así probado que en este
intervalo llegó la cédula elevando la Villa a ciudad de Ica, pues de otra
manera los escribanos no habrían cambiado en sus escrituras el título de la
población por el nominativo de ciudad que continuaron usando durante el
Coloniaje.
Aun cuando no se conoce el Acta oficial del Cabildo
histórico que recibió la cédula real de erección de la ciudad, revisando el
Registro de todo aquel año de 1633, he anotado las autoridades y cabildantes
que intervinieron en algún contrato dejando constancia de su cargo, y que
fueron los que recibieron y cumplieron la cédula aquella : Corregidor y
Justicia Mayor que presidió el Cabildo fue el maestro de Campo don Sancho de
Prado ; Teniente de Corregidor, don Alfonso Arias Gallardo; Alguacil Mayor, don
Tomás Suárez de Figueroa; Regidor y fiel ejecutor don Diego de Angulo; Procurador,
el Alférez don Juan de Morales Ayvar; depositario general de la ciudad, don
Domingo García Cifuentes; Alférez Real que portaba el estandarte de la Ciudad,
don Juan Paniagua y Loayza; Protector de los Naturales, don Sebastián de Vera y
Flores, y Escribano del Cabildo que leyó la cédula y sentó el acta, el Capitán
Juan de la Fuente, dejando así históricamente restaurado el primer Cabildo de
la Ciudad de Ica.
Cuando se fundó la Villa de Valverde, regía la ordenanza
dada por el Emperador Carlos V, en el año 1523, según la cual el fundador debía
nombrar el cabildo formado por las Villas de dos alcaldes y cuatro regidores,
tomarle juramento a los alcaldes y entregarles la vara de la justicia; mas,
cuando la Villa recibió el título de ciudad, ya estaban en vigencia las
Ordenanzas de Felipe Iisobre descubrimientos, población y pacificación, dadas
el 13 de julio de 1573, conforme a las cuales las ciudades sufragáneas de las
metropolitanas debían tener cabildo compuesto de ocho regidores, transformación
legal que vemos se ha efectuado en el Cabildo de Ica, dado el numeroso personal
de cabildantes que dejamos anotado.
Tomado de “ Reseña Histórica de Ica ”
Por : Dr. Alberto Casa Vilca
Historiador de la Ciudad
Conmemorando el 393º Aniversario de la Fundación de la Villa de Valverde del Valle de Ica.
Concejo Provincial de Ica – 1956
Por : Dr. Alberto Casa Vilca
Historiador de la Ciudad
Conmemorando el 393º Aniversario de la Fundación de la Villa de Valverde del Valle de Ica.
Concejo Provincial de Ica – 1956
hermosa historia.Buen trabajo.
ResponderBorrarLa historia, siempre sera la base de nuestra Cultura, buen trabajo.
ResponderBorrarla impresionante historia iqueña
ResponderBorrarla impresionante historia iqueña
ResponderBorrarfelicitaciones, muy buen trabajo
ResponderBorrarmuy chevere este blog lo recomiendo
ResponderBorrarMuy importante conocer la historia de nuestra región,excelente trabajo!
ResponderBorrarEste comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderBorrarQue buen trabajo mis queridos alumnos mis sinceras felicitaciones que Dios los bendiga mucha suerte
ResponderBorrarQue buen trabajo mis queridos alumnos mis sinceras felicitaciones que Dios los bendiga mucha suerte
ResponderBorrarQue buen trabajo. Felicitaciones
ResponderBorrarQue buen trabajo. Felicitaciones
ResponderBorrardefinitivamente el futuro de nuestra institución y nuestro país esta asegurado con estas chicas que nos sorprende a diario mis felicitaciones totales
ResponderBorrarEste comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderBorrarBuen trabajo chicas!
ResponderBorrarExcelente trabajo chicas. Es muy importante conocer nuestra historia.
ResponderBorrarFelicidades a vuestro esfuerzo...